Asesoramiento fitosanitario.

El asesoramiento fitosanitario, es uno de los requisitos indispensables de la normativa sobre uso sostenible de plaguicidas (RD 1311/2012), y es también, la base para la correcta aplicación de los principios de la Gestión Integrada de Plagas (GIP). Obligatorio en todas las explotaciones agrarias desde enero de 2014.

Para poder realizar el asesoramiento en materia fitosanitaria, los ingenieros agrónomos de Qalimentaria poseen la cualificación profesional requerida por la normativa para el papel de asesor fitosanitario.

Desde Qalimentaria también te asesoramos sobre otros sistemas de producción agraria:

Producción Integrada (P.I.)

La P.I. es un sistema de producción agraria respetuoso con el Medio Ambiente, los recursos naturales, la diversidad genética y la conservación del suelo y del paisaje. Está regulada por el RD 1201/2002.

La P.I. , a diferencia de la agricultura ecológica, permite la utilización de productos agroquímicos de síntesis (abonos, plaguicidas, …), si bien busca hacer un uso mínimo de los mismos, y este está restringido en las normas técnicas específicas de producción para cada cultivo, y sólo permitida si no existen otras alternativas viables.

Tiene su origen en la lucha biológica de plagas, extendiéndose a otras facetas del manejo del cultivo, evolucionando a la llamada P.I., que busca un equilibrio entre el medio ambiente, la rentabilidad y las exigencias sociales.

Agricultura ecológica

También llamada agricultura orgánica o biológica, regulada por el Reglamento 834/2007, es un sistema de gestión y producción agroalimentaria que combina las prácticas ambientales, la biodiversidad y la preservación de los recursos naturales, así como la aplicación de normas sobre bienestar animal.

Emplea métodos de cultivo biológicos y mecánicos, restringiendo los productos químicos de síntesis.

Global GAP

Norma reconocida internacionalmente para la producción agrícola, mediante estándares para buenas prácticas agrícolas (BPA). Establece unas normas voluntarias a través de las cuales se puede certificar productos agrícolas.

La creciente preocupación por la seguridad alimentaria y la protección del medioambiente, hace que la garantía del cumplimento de buenas prácticas en el sector, sea esencial para proporcional confianza a los consumidores.